SOYLENT GREEN
En Francia a mediados de los 70, en una de las clases de historia nos recomendaron ver en el cine Soylent green (1973 - Richard Fleischer), en España se tituló cuando el destino nos alcance, mientras que allí se llamaba Le soleil vert. Reconozco que me impacto muchísimo de aquella.
En plena ola sexteen, no solo en el cine, estaba en plena efervescencia todo tipo de manifestaciones artísticas y culturales en la línea futurista y catastrofista. El declive de la era acuario daba paso a movimientos tremendistas con mayor credibilidad a las profecías del Nostradamus y todo tipo de debates y oratorias mesiánicas, anunciando un prominente "fin del mundo" como excusa de la rápida evolución del hombre y la máquina.
En plena ola sexteen, no solo en el cine, estaba en plena efervescencia todo tipo de manifestaciones artísticas y culturales en la línea futurista y catastrofista. El declive de la era acuario daba paso a movimientos tremendistas con mayor credibilidad a las profecías del Nostradamus y todo tipo de debates y oratorias mesiánicas, anunciando un prominente "fin del mundo" como excusa de la rápida evolución del hombre y la máquina.
Interpretada por el magistral Edward G. Robinson y Charlton Heston con un papel a su medida, no deja de sorprenderme como se mantiene y lo adelantada que estaba en su momento. Nos muestra la sociedad del siglo XXI al límite de su existencia, con todos los recursos naturales agotados, obteniendo como resultado una superpoblación en la miseria más absoluta encaminada a un final apocalíptico.
El mundo feliz de Aldous Huxley no iba desencaminado, si allí era el soma que mantenía el control de la población menos afortunada, en esta otra es el soylent green, un alimento sintético que se distribuye dosificado para acallar la desesperada multitud, llevando las riendas una gran corporación con intereses propios.
Me quedaré con el entrañable Robinson degustando una hoja de lechuga como si de un delicatessen se tratase o palpando con suma delicadeza las pastas de un libro. No dejéis de verla.
Un abrazo.
1 comentario:
Gracias por la recomendación. Hablando de manifestaciones y de Francia, me he acordado de una pelicula que vi hace poco y me gustó bastante: SOÑADORES de Bertolucci. Una historia de amor narrada en el escenario de las revueltas del 68 en París, cargada de continuos referentes y homenajes al cine clásico. Una peli para el deleite de los más fikis :-)
No está en la linea futurista de la del post, pero me he acordado y os la recomiendo también.
Besos a todos
Pura Vida.
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