PUEDES HACERLO

Este texto me lo encontré el otro día en otro lugar. Me apetecía extenderlo (aunque no haya recibido aceptación expresa). Espero que os guste...

Adelante, que tú puedes con esto y mucho más.
Seguro que esta vez mamá no decía lo mismo. Es una pena, porque ahora sí habría tenido razón. Me siento en la ventana, no sin complicaciones, pero convencido de lo que voy a hacer. Es gracioso ver cómo me cuelgan los pies y aun así no me siento pequeño. Voy a hacerlo. Detrás de mí, una multitud ruidosa, demasiado ruidosa; nadie se percata de que hoy sí puedo. Mamá tenía razón. Voy a hacerlo. Parece que en mi ‘cubículo’ sin paredes suena el teléfono... Seguramente pregunten por Olga, como todos los días a esta hora. No entiendo cómo puede seguir llamando al número equivocado. Voy a hacerlo. Desde aquí las veo mejor. Quizá cuando lo haga sí se asomen a la ventana y me vean, después de tantos años y de tantas horas muertas de oficina espiándolas. Seguro que lo hacen. Voy a hacerlo. Sólo un pequeño empujón con las manos. Allá voy.

Después de cinco plantas de disfrutar la caída despliego el patagio. A esta altura sois vosotros los insignificantes.