jueves, febrero 16, 2006

ENTRE BUTACAS

Queda menos para finalizar con esta atadura a la mesa de trabajo, prohíben de fumar porque mata ¿y el exceso de curre alarga la vida?... espero poder escribir muy pronto sobre Marilyn Monroe como prometí hace unos meses, además de la sugerencia de Leti sobre un homenaje al gran Robert Mitchum.

Mientras tanto unas pequeñas sugerencias entre filas, con o sin palomitas:

Si queréis llorar a moco tendido y entender de una vez por todas que no se debe luchar contra el amor, después de cruzar los puentes de Madison nada mejor que una cabalgada por Brokeback Mountain.

Nunca lo dejes escapar

En la era del terrorismo universal, se repite como tantas otras veces, una controversia maratoniana a lo Spielberg por Munich.

Cuando acabara todo esto

Una caza de brujas truncada a destiempo después de tanta quema, si Juana de Arco levantara la cabeza alucinaría lo poco que han evolucionado los primates. Good night, good luck.

Thank you Mister Murrow

Integridad y sensibilidad, dos adjetivos que acompaña, entre otros, a Isabel Coixet, poco más puedo decir. La vida secreta de las palabras.


Sin palabras

Para los incondicionales de Lars Von Trier que no hayan tenido lo suficiente con "bailando en la oscuridad" y "Dogville" (me incluyo), un garbeo por Manderlay (la segunda de su trilogía).

Sigue hablando Lars

Si gustáis saber más sobre el excéntrico autor de "desayuno con diamantes" o "a sangre fría", preparaos para el próximo estreno de Capote.

Truman, el verdadero

Un abrazo.

7 comentarios:

d... dijo...

Acababa de recibir un correo de ésos de reenvío múltiple en que salía un muñecajo y debajo ponía: 'Un cigarro acorta la vida 2 minutos. Un whisky acorta la vida 4 minutos. Un día de trabajo acorta la vida 8 horas!'. Es una estupidez, pero me ha recordado.

Y, por favor... el cine sin palomitas... siempre...

d... dijo...

Estoy de acuerdo con lo del tabaco... en cuanto termine de contestarte, me enciendo otro cigarro (en la calle, por supuesto...)

En cuanto a lo las palomitas... lo siento... yo soy muy comprensivo de boquilla... pero en realidad soy un maníatico al que le entran ganas de meterles la cabeza en esos inmensos cubos a los comedores en el cine. Odio también a quienes comentan la película como si estuvieran en el salón de casa; a quienes se creen graciosos y hacen comentarios teóricamente jocosos en voz de alta; a las parejas que parece que van a empezar a follar sobre la butaca; a quienes llegan tarde y te obligan a levantarte de tu sitio para dejarles paso; a los niñatos malotes que SIEMPRE van en grupo y se creen los reyes del mundo...

En fin, creo que después de fumarme el cigarro voy a tener que pedir cita otra vez con mi psicólogo...

d... dijo...

jajaja
Por supuesto... pero no es por el cine... esté donde esté, siempre me entran ganas de comer, de fumar y/o de dormir... Es inevitable...
El problema es que muchas veces me concentro más en el sonido de las mandíbulas que mastican las palomitas, a las conversaciones del sofá, a la mano del tipo que va entrando ya en zona peligrosa, en intentar no caerme y no tapar la visión de los de atrás mientras dejo paso, en 'reprimir el instinto asesino' cuando miro a los niñatos... que en la peli en sí...

Leti dijo...

Me alegra mucho saber que no fui la unica en llorar con BrokeBack Mountain. Para mi la mejor de las anteriores mencionadas (aunque no he visto Manderlay).
No habia visto nada asi desde mi adorada Puentes de Madison. Creo que la comparación es inevitable y necesaria. Emocionadita me tiene Ang Lee.
Y por cierto se pueden comer palomitas sin hacer ruido, joooooooooooo

d... dijo...

Venga, coño... qué precisamente tú defiendas las palomitas???!!!

Leti dijo...

Me gustan!!!!! Me gustan, me gustaaaannnnn!!!!!!!!!!

d... dijo...

JAJAJAJA
Vale, vale... lo respeto (de boquilla, ya lo sabes...).
Intentaré reprimir mi instinto asesino especialmente contigo se te veo comerlas en el cine...