sábado, julio 08, 2006

A NIGHT LIKE THIS

Say goodbye on a night like this
If it's the last thing we ever do
You never looked as lost as this
Sometimes it doesn't even look like you

It goes dark
It goes darker still
Please stay
But I watch you like I'm made of stone
As you walk away


I'm coming to find you if it takes me all night
A witch hunt for another girl
For always and ever is always for you
Your trust
The most gorgeously stupid thing I ever cut in the world

Rescato esta canción en un momento de tranquilidad mientras paseamos por las calles de El Escorial. Ana Curra se acaba de marchar a casa unas horas antes del inicio del concierto. The Cure suena apropiado en mi cabeza, y de alguna manera lejana, vamos pensando en la despedida.

No hubo sesión de fotos propiamente dicha. Hablamos, hicimos fotos con su gente y entre ráfagas de palabras y gestos, robamos un minuto para posar. Empiezas a entender ciertas cosas cuando fotografías a una chica punkie de unos 20 años que luce un tatuaje de Ana (basado en una foto de Alberto, claro) apoyada en la Ana de carne y hueso. Realidad y leyenda. Mito. Pasado, presente y futuro, frente a frente.

Esbozo una media sonrisa cuando la oigo hablar de fotografía. Cuando posa. Es que cinco años con Alberto dan para mucho. Y yo no acabo de creérmelo. El entendimiento de la luz, la naturalidad con la que me dirige, no me parecen algo aprendido.

Ana corre por el escenario, organiza, no para. En la prueba de sonido canta Autosuficiencia y Unidos de Parálisis Permanente. Se sienta a descansar un momento y cuando cierra los párpados no dejan de agitarse. Es una pena no fotografiar esos ojos azules, quizá un díptico sea la solución.

¿Y qué más puedo decir? Ayer falló todo. Se rompió la cámara, el objetivo, y con un truco de magia, Vane lo hizo volver a funcionar. Me rompí las uñas contra los tornillos del espejo. En cuanto a las fotos, sé que están, no hay ninguna duda. Tuvimos dos momentos de estremecimiento que hicieron añicos todos los vidrios que separaban nuestras pupilas. Instantes de verdad, de entrega sin red. Solo pudimos acabar dándonos un abrazo. Esta foto es bonita, me dice con voz entrecortada. Es la certeza de que, en una tarde como esta, nos hemos encontrado.

Pura Vida.

2 comentarios:

vanmar dijo...

"En un mundo de fugitivos, quien tome la dirección contraria parecerá que esta huyendo"

Ana Curra

Anónimo dijo...

Desdichado sea todo el que pueda vivir momentos mágicos como el que describes.