domingo, octubre 15, 2006

YANN TIERSEN


En ocasiones, las cosas no salen como uno espera. Y te llevas una sorpresa. Hace un par de meses inicié las infinitas gestiones para fotografiar a Yann Tiersen en su concierto de Madrid pero una vez llegados al tour manager (esa persona todopoderosa que acompaña al artista en todos sus desplazamientos) se hizo el silencio. De nada sirvió reenviar los correos, el portfolio, las cartas de presentación. Más silencio. Y lo normal en estos casos, lo das todo por perdido y a otra cosa. No ibamos a quedarnos sin ver a este músico en concierto, así que tampoco era tan grave.

Sin embargo, el día antes, un correo sorpresa. Perdón por el retraso, no hay ningún problema, espero que no sea demasiado tarde, mañana a las 18.30 cita en La Riviera, ¿está bien?

Y así, el momento del encuentro. El saludo fue profesional, frío. Tienes 15 minutos, ¿vale? Y nos dejaron a solas.

Yann Tiersen es una persona tímida, reservada. Poco conversador pero correcto. El pelo más largo que en las fotos, y un aspecto alejado de todo glamour. Apenas hablamos durante la sesión. Intenté sacar algún tema, pero los nervios y las gotas de sudor cayendo a mares sobre la cámara me avergonzaron lo suficiente para no poder mejorar mucho al ambiente.

Según avanzaba el cronómetro e iba haciendo fotos fui entendiendo algo de lo que ocurría. Yann Tiersen no ejerce de estrella. Pero de eso a abrirse la camisa ante el primero que pase por allí con una cámara hay un trecho. Sentí la lucha entre los dos, entre lo que él quería ofrecerme y lo que yo buscaba llevarme de aquella habitación. Y a principios del segundo rollo, ocurrió. Algo atravesó la mirada de Yann derritiendo su máscara. Solo fueron algunos segundos. 3 fotos más tarde, había recuperado el control y todo se había desvanecido.

Hoy se me hace duro aceptar esa parte depredadora, cínica, que existe en toda fotografía. Como ya dijo otro, la cámara pesa.

Pura Vida.

2 comentarios:

María Esquitin dijo...

pSiempre he querido fotografíar a alguien asi, pero tambien he querido estar al otro lado, y que me fotografíen a mi: ¿qué se sentirá siendo parte de una foto de alguien concreto?.

Unknown dijo...

A Tiersen nunca le han gustado las entrevistas o los fanáticos. Me imagino que una sesión de fotos no le hace mucha gracia jajajaja. Veo que captaste su momento de severidad pero en realidad es puro amor este hombre, de siempre y para siempre.