EL REGRESO
Aproveche este puente para irme a la costa norteña, necesitaba respirar y desconectar, probar el salitre y recorrer diversos lugares dónde nunca había estado, necesitaba oler las algas y ponerme ciega de buen pescado en las lonjas. Ver los barcos pesqueros que se preparaban para faenar. Desayunar con el ruido de las gaviotas y la resaca del mar. Sentir todo esto me ha situado y recargado las pilas.
Un abrazo y Pura Vida
2 comentarios:
me alegro un montón.
a ver cuando te vienes a probar la costa mediterránea.
1 abrazo.
Me alegro de lo que dices.
Un abrazo.
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